Museo de Memoria Histórica de Las Vueltas
Un espacio vivo para la experimentación y la interacción social
El Museo de Memoria Histórica de Las Vueltas, ubicado en el corazón de Chalatenango, El Salvador, busca fortalecer la profunda conexión de la comunidad con su pasado, su sensibilidad ante los desafíos contemporáneos y su capacidad para visualizar el futuro. La base del museo se encuentra en las memorias individuales y colectivas del conflicto armado, que moldearon profundamente las vidas de sus habitantes y su fuerte organización social. Diseñado como un espacio comunitario dinámico, el museo no solo albergará artefactos históricos, sino que también servirá como un centro de educación, socialización y expresión artística, además de contar con un estudio de grabación de alta calidad para músicos de la región. Al integrar estructuras existentes y actividades comunitarias, el museo tiene como objetivo profundizar el entendimiento de la historia local, inspirar a las generaciones más jóvenes y proporcionar un lugar para la reflexión y el compromiso. Al enfatizar un enfoque arquitectónico flexible e informal, el diseño incorpora técnicas constructivas populares y ancestrales que fomentan un espacio de socialización y experimentación.
Desarrollo inicial del proyecto del Museo de Memoria Histórica
En el marco de un taller participativo en enero 2022, el municipio de Las Vueltas en Chalatenango expresó su intención de desarrollar un proyecto de museo de memoria histórica en el centro urbano del pueblo. La población de Las Vueltas está profundamente ligada a este tipo de memoria histórica, ya que aproximadamente el 95% de sus habitantes actuales son sobrevivientes del conflicto armado o sus descendientes. Es crucial prestar una atención especial al legado de esta historia, especialmente para las generaciones más jóvenes, ya que a veces surgen tensiones debido a la incredulidad o desconocimiento de las generaciones más jóvenes sobre la guerra, sus causas y los beneficios que la lucha aportó a la sociedad civil.
El lugar propuesto para el museo forma parte de un conjunto de cuatro edificios que conforman un espacio de circulación en forma de cruz. Estos edificios son propiedad de la Asociación de Desarrollo Comunal de Las Vueltas (ADESCO), y la comunidad ha obtenido un contrato de arrendamiento para utilizarlos en el proyecto del museo. Detrás de esta estructura abierta se encuentra una sala multifuncional con un podio y espacio para unas 100 personas. En la parte trasera del complejo, hay una vista hermosa que actualmente está subutilizada, junto con un pequeño jardín que tiene algunas mesas deterioradas.
Al otro lado de la calle y junto al terreno deportivo, se encuentra un área de juegos infantiles y una casa en malas condiciones. Este es el espacio planificado para el futuro museo. Detrás del edificio se encuentra una sala de rehabilitación para la comunidad. Es esencial considerar cómo el proyecto se integra con los otros usos y actividades comunitarias que tienen lugar en el terreno. Será necesario un análisis detallado para determinar la viabilidad y la mejor manera de aprovechar los espacios existentes y garantizar el crecimiento futuro del museo.
Exploraciones iniciales : un museo en tres casas.
En septiembre de 2022 se presentaron primeras reflexiones aunque el proyecto carecía de un programa definido. La propuesta fue concebida por las y los arquitectos y el equipo de investigación como una manera de provocar la reflexión y la reacción para alimentar una conversación colaborativa más concreta sobre la naturaleza del proyecto.
El Museo de Memoria Histórica de Las Vueltas se ubicará en un complejo existente que se compone de un parque infantil, un pabellón deportivo, un gimnasio y varios espacios de usos múltiples. Todos estos espacios son, a su vez, espacios exteriores muy estrechos que aseguran la circulación entre los edificios. Sin embargo, estos espacios son demasiado pequeños como para realizar reuniones o actividades.
La parte trasera del complejo posee una hermosa vista que se encuentra poco aprovechada. Tiene un pequeño jardín con un par de mesas bastante olvidadas. Actualmente, la colección del museo es muy pequeña y su funcionamiento y vocación están aún por definirse. La pregunta principal es probablemente, ¿Cómo crear un museo que beneficie y complemente las demás actividades del complejo comunitario? ¿Cómo este museo puede mejorar la calidad de todo el sitio?
Todas las actividades parecen ser fácilmente intercambiables dentro de los diferentes edificios. La propuesta formulada durante el taller fue considerar el museo como una serie de "casas” distribuidas por todo el sitio en lugar de un único espacio. Este enfoque permitió una mayor diversidad y posibilidad de actividades. Tres casas para tres actividades diferentes. En caso de ser necesario, se propuso añadir un segundo nivel a una de las casas para proporcionar más espacio. En este nuevo acuerdo, el espacio entre los edificios y el tipo de suelo (material y color) adquieren importancia a medida que se convierten en parte del museo. Los espacios exteriores cobran importancia.
Sin embargo, esa orientación fue cuestionada, fundamentalmente porque el espacio de usos múltiples y la sala de rehabilitación habían sido renovadas recientemente, además, no parecía factible modificarlas nuevamente. En conclusión, se volvió necesario centrarse en la parcela cercana a la calle realizando mejoras en el jardín y en las instalaciones sanitarias. Sin embargo, un resultado importante de este taller fue la definición más detallada del programa y la identificación de la oportunidad de incluir un estudio de grabación musical, contemplado dentro del marco del proyecto Memoria Histórica Sobreviviente el El Salvador de la Posguerra.
Definición del programa: museo, música, socialización
En septiembre de 2022, se organizó un nuevo taller participativo con la Asociación de Desarrollo Comunal (ADESCO), la alcaldía de Las Vueltas, representantes de la comunidad, integrantes de la Asociación Sumpul e investigadoras/es, colaboradoras/es y académicas/os de la Universidad Western (Canadá) y la Universidad KU Leuven (Bélgica). A partir de un análisis arquitectónico preliminar, el taller tenía como objetivo definir con mayor precisión el programa y las ambiciones del Museo de Memoria Histórica de Las Vueltas.
El museo contará con espacios de exposición permanentes y temporales. De esta manera se brindará un apoyo educativo permanente vinculado a la historia local y también se integrará el museo en una red dinámica de intercambios como parte de una red de museos en Chalatenango y otros departamentos. En 2022, la comunidad no disponía de una colección propia significativa, pero se está iniciando el proceso de recopilación de artefactos y de documentos, así como la cartografía de actividades de interés para el museo, tales como la producción artística y artesanal local.
Además, el museo incorporará un estudio de grabación de calidad y tamaño adecuados para los grupos de música. El estudio complementará el salón de usos múltiples que será adecuado para los conciertos y los ensayos. La meta es que el museo se convierta en un punto de referencia regional para actividades de pedagogía, difusión y producción musical.
Asimismo, el museo contará con un centro de documentación que ofrecerá espacio para estudio, reuniones y talleres de investigación. Para integrar el museo con el espacio público, se incluirá una cafetería y una tienda. La cafetería creará un entorno abierto de intercambio y será muy útil para las otras actividades en el lugar, de la misma manera que el terreno de deporte, el salón multiusos y los salones para asociaciones. De este modo, el museo se convertirá en un lugar de encuentro informal que dará presencia a la memoria histórica como elemento cohesionador de la comunidad. En la tienda se podrán encontrar objetos y productos sostenibles locales como café y productos de la zona, bordados, artesanías y libros.
Sería interesante que la cafetería tuviera una cocina y un fregadero compartidos para las actividades comunitarias. Es importante considerar la creación de un espacio abierto acogedor, ya que actualmente el terreno está completamente construido y no permite reuniones fuera de los edificios. La siembra de plantas y árboles será importante para proporcionar mayor frescura y crear un ambiente agradable en el entorno del museo.
El Museo de Memoria Histórica de Las Vueltas se presenta como un testimonio vivo de la historia local, un espacio de reflexión, aprendizaje y participación comunitaria que se integra en las dinámicas sociales, económicas y culturales de la localidad y de la región, promoviendo la memoria histórica y contribuyendo al desarrollo local con un enfoque integral y sostenible.
Diseño en tres niveles
En enero del año 2023, una nueva propuesta de diseño fue presentada y discutida durante un taller participativo en la alcaldía de Las Vueltas. Para lograr todas las actividades planificadas y ofrecer espacios abiertos que conecten el museo con el espacio público y las demás actividades del lugar, se propone que el museo sea desarrollado en tres niveles.
En el primer nivel, una tienda y un café se abren completamente al espacio cubierto por la primera plataforma. Este espacio permite realizar reuniones informales en paralelo a las diversas actividades del centro, aprovechando la sombra y el ambiente acogedor del lugar. La tienda y el café serán el corazón del complejo, con excelente visibilidad desde el espacio público.
En el segundo nivel, habrá un estudio de grabación con un espacio de monitoreo que también podrá funcionar como oficina administrativa. Estas instalaciones estarán climatizadas para ofrecer una excelente acústica. El centro de documentación será un espacio abierto con una gran mesa comunal de madera. Los libros y documentos se almacenarán en un mueble adecuado, aprovechando las instalaciones del estudio de grabación. El centro de documentación está concebido como un lugar para trabajar, estudiar, reunirse e investigar, más que como una biblioteca convencional.
En el tercer nivel se ubicará el espacio de exposiciones, concebido como un espacio cuadrado con galería exterior. La galería y la sala podrán albergar exposiciones diferenciadas. La sala tendrá dimensiones adecuadas para integrar las actividades grupales según el diseño museográfico. La sala de usos múltiples se mantendrá, pero se considera la posibilidad de convertir las ventanas en puertas que den acceso al jardín, permitiendo utilizar el espacio verde como parte de las actividades. En la parte trasera de la sala, se reorganizarán los baños y la bodega.
Se renovará el pequeño jardín con mesas y los juegos infantiles que había en la zona del museo se trasladarán a esta zona. Los árboles existentes se mantendrán, y se podrán añadir más plantas y árboles para proporcionar un ambiente fresco y agradable.
El museo se destaca por su estructura abierta de plataformas de concreto en forma cuadrada, sostenidas por nueve columnas y cubiertas con un amplio techo piramidal de tejas cerámicas. Esta arquitectura ofrece una gran flexibilidad, permitiendo que el espacio se adapte a diferentes usos a largo plazo.
Materiales diferenciados
Tras la aprobación general de la estrategia en tres niveles, el equipo de arquitectura e investigación detalló la propuesta tomando en cuenta los resultados del taller anterior. Esa propuesta se discutió en agosto de 2023. Para este taller, estudiantes de arquitectura de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA) hicieron un modelo a gran escala (1/50) como parte de su requisito de servicio social, junto con maquetas para los proyectos de museos en Las Vueltas y Arcatao. El grupo de estudiantes estaba compuesto por Diana Carolina Granados Marroquín, Luis Alejandro Peña Flores, Gracia María Guardado Reyes, Anamaría Esmeralda Alfaro Rivera, Gabriela Concepción Urrutia Marroquín, Marilyn Hilary Mérida Montano, Wanda Sofía Campos Santamaría, Moisés Esaú Aguilar Hernández, Valeria María Cienfuegos Alvarenga, Fátima Aracely Elías Turcios, Mariana José Castillo Beltrán, Paola María Argueta Mena, Karla Daniella Ayala López, José Luis Arriola Villalta, María José Rivas Hernández, y Valeria Daniella Quevedo Barrera. El grupo trabajó bajo la supervisión del profesor Alexander Renderos y la profesora Karina Mora, en colaboración con Harold Fallon, Evelia Macal y Thomas Montulet.
Arquitectónicamente, las construcciones secundarias que albergan las distintas áreas del museo están construidas con materiales diferenciados, teniendo en cuenta necesidades específicas y centrándose en su carácter ecológico. Esto implica combinar técnicas industriales como el uso de estructuras de concreto y metal, con materiales populares como bloques de concreto y tejas sostenidas por barras de acero, así como la reutilización de materiales desechados. Además, se incorporan técnicas ancestrales como el bahareque o el adobe, mezclando distintas tradiciones constructivas en armonía con el entorno. Esta combinación de materiales y técnicas refleja un enfoque integral que busca la sostenibilidad y la conexión con la historia local y la cultura. El resultado es una arquitectura híbrida y colorida que invita al uso y se adapta a los espacios.
La ubicación estratégica del museo lo convierte en un punto de referencia urbanístico, generando espacios abiertos donde se pueden sembrar árboles y crear entornos verdes. Esta combinación de elementos arquitectónicos y naturales ofrece un ambiente distintivo y atractivo para el museo, invitando a las personas visitantes y a gente de la comunidad a explorar y disfrutar de sus instalaciones.
El museo se posiciona como un lugar abierto de intercambio y cohesión social que promueve la memoria histórica y contribuye al desarrollo económico y cultural de la comunidad. A través de la incorporación de una tienda, una cafetería y un estudio de grabación en combinación con la sala multiusos existente, el museo se convierte en un espacio dinámico y multifuncional. La tienda ofrece productos y artesanías locales, lo que promueve el desarrollo económico local y la valoración de la cultura. La cafetería se convierte en un punto de encuentro y de intercambio informal, fomentando así la convivencia y la creación de redes. El estudio de grabación proporciona un espacio adecuado para la producción musical, convirtiendo al museo en un referente en actividades de difusión y producción artística. La sala multiusos existente se utiliza como un espacio versátil para conferencias, eventos y actividades comunitarias. En conjunto, estos elementos fortalecen el papel del museo como un centro cultural vivo que apoya la memoria histórica, el desarrollo local, la promoción de la identidad y el patrimonio de la comunidad.
Conexiones y sinergias
Después de esta actividad, en mayo del 2024 el equipo de arquitectura e investigación, en compañía de la gente de la comunidad, visitaron varios lugares buscando sinergias con el futuro Museo de Memoria Histórica de Las Vueltas. Estas visitas incluyeron el sitio paleolítico de El Tablón, donde se encuentran petroglifos prehistóricos. El colectivo de bordadoras “Mujeres Vueltenses Bordando Historia”, que forma parte del proyecto Memoria Histórica Sobreviviente en El Salvador de la Posguerra, es muy dinámico, y su producción artesanal y artística se beneficiará de la dinámica del museo. Ellas participan en numerosas actividades en el marco de Memoria Sobreviviente, junto con el Museo de la Palabra y la Imagen (MUPI) y la bordadora Teresa Cruz. La región también se beneficia de cafetales artesanales. A partir de 2024, los esfuerzos se centrarán en detallar la construcción a nivel de edificio y refinar la posición del museo como institución dentro del contexto local y la red de museos. Al mismo tiempo, comenzarán las reflexiones sobre el financiamiento, la colección y los primeros pasos para iniciar los trabajos de construcción.
Equipo
Coordinación local del proyecto: Heidi Calderón, Juan Carlos Nuñez, Nelson Rodríguez, Padre Bernando (Brendan Forde) (†2024)
Arquitectura: AgwA + Evelia Macal: Harold Fallon (AgwA, Universidad KU Leuven), Evelia Macal, Thomas Montulet (AgwA, UCLouvain), Nomundari Munkhbaatar (AgwA), Georgi Dimitrov (AgwA), Roberto Urbina
Maqueta: Estudiantes de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA) bajo supervisión de Alexander Renderos (UCA) y Karina Mora (UCA)
Agradecimientos especiales a las y los estudiantes por su participación en el marco de su programa de estudios.