En abril de 2022, la Asociación Sumpul organizó un taller participativo en el municipio de Las Vueltas como parte de la iniciativa Memoria Histórica Sobreviviente en El Salvador de la Posguerra. En el taller participaron sobrevivientes, integrantes de la comunidad, lideresas y líderes locales, arquitectas/os y representantes de la Universidad KU Leuven, Universidad Western y la Escuela de Artes de la Universidad de El Salvador. El debate se centró en las formas de mejorar las conmemoraciones anuales de las Masacres de La Laguna de San Ramón (también conocida como La Laguna Seca). Este lugar significativo durante la guerra civil salvadoreña, es un sitio de conmemoración en el que alrededor de 300 personas se reúnen anualmente el 11 de marzo para recordar a las víctimas de masacres y bombardeos entre 1979 y 1983.
El proceso de diseño del memorial comenzó con la idea inicial de una plataforma horizontal. Se hizo hincapié en crear un diseño simbólico y respetuoso que también permitiera el uso comunitario más allá de los eventos conmemorativos. La propuesta incluía elementos móviles como un altar y las reliquias para apoyar el carácter procesional de las conmemoraciones.
El desarrollo del proyecto dio paso a una serie de principios de diseño. En primer lugar, la creación de gradas que siguen la topografía natural e incorporan un muro reflector acústico con los nombres de las víctimas. En segundo lugar, la plantación de árboles de jacarandas a lo largo del sendero conmemorativo y que florecen en marzo, todo esto para aumentar la visibilidad y la participación comunitaria con el memorial.
A principios de 2023, tras las aportaciones y aprobación de la comunidad, el diseño fue presentado al ingeniero Guillermo Candela, quien abordó los problemas de presión del agua en las paredes de contención. El diseño revisado presenta estructuras de acero más ligeras, incluido un reflector acústico curvado de apariencia flotante, armonizando con el paisaje del valle. Este elemento etéreo honra a las víctimas mientras que se integra en el entorno natural.
El desarrollo del diseño incluyó talleres donde se crearon altares móviles y reliquias. Los mismos fueron llevados a cabo con el Departamento de Organización del Espacio de la UCA y participaron aproximadamente 150 estudiantes de primer año. Estos talleres tenían como objetivo diseñar elementos prácticos y significativos para el memorial. Los resultados se presentaron a la comunidad en agosto de 2023, lo que promovió una discusión continua y una evaluación del diseño y propósito del memorial.