De 2022 a 2023, el Comité de Memoria Histórica Sobreviviente de Arcatao trabajó en colaboración con un equipo de investigación de la Universidad Western y la  Asociación Salvadoreña Canadiense (ASALCA) para recopilar los nombre de las personas que fueron asesinadas o fallecieron en el conflicto armado entre 1970 y 1992. Dicha investigación se convirtió en la base para la creación de las placas cerámicas conmemorativas y para un libro titulado Vivencias y memorias de Arcatao (2024). Las placas cerámicas instaladas en octubre de 2024 en el santuario de Arcatao, indican el año de nacimiento, el año de fallecimiento y la edad de la persona al momento de su muerte. En los casos en que no fue posible completar los datos, el equipo colocó las letras "NI", que significan "no identificación”. Las placas se dividen  entre las personas fallecidas en la infancia (0 - 17 años) y en la edad adulta (18 años o más). Dentro de estas categorías, el equipo subclasificó las placas por año de asesinato o fallecimiento, y después se enumeró a cada persona por orden alfabético según su apellido. Las placas cerámicas  honran la memoria de las personas, proporcionan un espacio para que sus familiares puedan visitarlas y sirven como un llamado para evitar que la guerra y la violencia política  se vuelvan a repetir en las comunidades salvadoreñas.